Olavarría es el distrito de la séptima sección electoral que mayor presupuesto tiene, pero no solamente por su extensión y población, sino que además cuenta con el llamado “impuesto a la piedra” que engrosa de manera muy importante los ingresos a la comuna.
Sin embargo, en este 2024 la caída de la actividad económica y la paralización de las obras con fondos públicos y la reducción de las inversiones de los privados, hizo que las cementeras no tengan las mismas ventas que años anteriores y eso, directamente, repercute en las arcas municipales.
En una entrevista con Radio Olavarría, la jefa de Gabinete municipal, Mercedes Landívar, se refirió a esta situación. “Los despachos de cemento cayeron un 48 por ciento, la recaudación del impuesto a la piedra en febrero fue un 32 por ciento más baja con relación al año anterior y a esto se suma la crisis social que se profundiza y la demanda que es terrible”.
“Estamos hablando de números que nos preocupan mucho, más la crisis social que se profundiza y la demanda que estamos teniendo que es terrible. Los valores de los alimentos y de los insumos se triplicaron”, manifestó y añadió: “La realidad es que no hay, por lo menos hasta el momento, un plazo para visibilizar una mejora, ojalá esto se revirtiera y hubiera un acompañamiento del Estado Nacional como hubo en otros momentos”.